Al menos ochocientas personas que tenían programadas citas médicas y análisis clínicos la mañana del lunes 17 de septiembre, se vieron perjudicadas por la carencia de energía tras el hurto de cableado eléctrico en la Clínica de Medicina Familiar del Issste, en Hermosillo.
Conforme con autoridades de este centro médico de carácter federal, las pérdidas más esenciales fueron la insulina, los reactivos del laboratorio, las vacunas y otros fármacos que requieren ser refrigerados.
Francisco Javier Muro Dávila, subdelegado médico del Issste en Sonora, precisó a las 11:00 horas del día de ayer que el servicio de energía eléctrica quedó reestablecido, con lo que se atendió a los derechohabientes que tenían citas a lo largo de la tarde.
Tras padecer actos salvajes externos, se programará consulta vespertina y se va a hacer inventario de daños a suministros médicos y reactivos de laboratorio; donde impacta mucho asimismo es en el servicio de farmacia, pues no reciben la consulta y tampoco el fármaco.
El médico señaló que se deben realizar las actas pertinentes sobre las pérdidas, reportarlas en los respectivos seguros y solicitar al Centro Nacional de Distribución que se provean de nuevo los fármacos.
“Fue un acto vandálico de gran magnitud que afecta no sólo lo inmediato, sino todos los servicios”, mencionó Muro Dávila.
En el registro eléctrico de la Clínica, afirmó, se halló la pinza que los criminales emplearon para abrirlo, aparte de una jeringuilla con la que se alardea que se inyectaron droga mientras que se hallaban en el sitio.
“Aflojaron las tuercas y cortaron el suministro que va al edificio, pero afortunadamente para cortar la energía tiene que ser desde las cuchillas (del transformador) y por eso no se llevaron más; el Issste contrató una empresa para reestablecer la energía eléctrica y poder laborar lo más pronto posible”, resaltó.
PIDEN REAGENDEN RÁPIDO
Derechohabientes que perdieron sus citas para consulta y análisis clínicos, solicitan a las autoridades del Instituto que se las agenden de nuevo, mas no en un largo plazo, puesto que esperasen hasta un mes para entrar con los médicos.
“Habemos personas que venimos por medicamentos cada mes, aún con el calor, por lo que debería haber personas dándonos el medicamento; igual, creo que deben darnos prioridad para citarnos, porque a veces se tardan hasta quince días o un mes”, señaló Gloria Vega.
Francisco Solórzano, asimismo derechohabiente, insistió en que el Issste debe contratar a guardias de seguridad tanto para el día para la noche, para eludir que prosigan ocasionando daños al centro médico.
